martes, 24 de julio de 2012

Reencuentro con mi blog

Hola: Me encanta saber que, aunque no escriba, mi blog sigue tocando la fibra sensible a alguno, que, buscando en Google, se tropiezan con este blog, y les pica la curiosidad. Después de bastante tiempo sin hacerle caso, me reincorporo hoy para compartir con la sociedad que, como yo, está sufriendo las consecuencias de la crisis. Todo el mundo intenta animarme diciéndome,que igual no estaba muy contenta en mi trabajo, o que ahora tengo la oportunidad de encontrar un trabajo mejor y más cerca de mi casa. Otros me dicen que me relaje, que en septiembre florecerán los puestos de trabajo. Y unos pocos que confíe en el Señor, aunque.... Si no muevo ni un dedo, por mucho que confíe en Él, poco voy a hacer. Por ahora, mi situación no es catastrófica, mientras pueda pagar el internet.... todo va bien, porque hasta para apuntarse a la Oficina de Empleo, y seguir sus procedimientos, se necesita el dichoso internet. Os digo yo, que el mundo no está hecho para los pobres. Ausencia de Dios, desesperación y ahogo, es lo que encuentro en la calle. ¿Dónde está Dios en esta catástrofe? Que no se le ocurra a ningún sacerdote pasar por la oficina de empleo, que lo crucifican, yo voy con mi crucecita y ya me miran. Y me preguntan, ¿Por qué Dios permite estas cosas? ¡No lo sé, estoy en tu misma situación!

2 comentarios:

zaqueo dijo...

Sólo nos acordamos de Santa Barbara cuando truena.

Giocondo dijo...

buena apreciación Zaqueo , nosotras en cuanto estamos cerca nos acordamos de Jesús y le dedicamos esta imagen