martes, 15 de diciembre de 2009

EDUCACION AFECTIVO-SEXUAL

Este fin de semana, he asistido al final de un interesante curso de Educación Afectivo-Sexual, donde vemos que la vida afectivo-sexual, se realiza desde la concepción hasta la muerte del ser humano.

Todos y cada uno de nosotros necesitamos ser amados.
Cuando somos pequeños necesitamos ese amor que nos dan los padres, cuando somos jóvenes además de nuestros padres, necesitamos ser reconocidos en nuestros ambientes, y cuando somos adultos, por nuestras parejas, pero en todos los casos, no debemos olvidar que cada uno de nosotros tenemos el Amor más grande: Dios.

Es muy importante el papel de los padres en nuestro comienzo a la vida.
A partir de la afectividad que recibamos de ellos, dependerá de las relaciones que conllevemos en un futuro con otras personas.
Es importante que hableis con los hijos, que tengan la suficiente confianza para contaros lo que les ocurre, reformular sus preguntas, interesaos por sus cosas.
No dejéis pasar las fases de vuestros hijos, os necesitan para llegar a la edad adulta.

Algunos tenemos que recurrir ahora a psicólogos porque no tuvimos esa educacion Afectivo-Sexual desde pequeños.

De verdad, con una buena comunicación, además de formación, se pueden ahorrar muchos disgustos, como:
Embarazos no deseados.
Jóvenes con demasiado tiempo libre como para aburrirse y tengan mas oportunidad de zascandilear por las calles.
Inclinaciones sexuales...

3 comentarios:

Angelo dijo...

Lo has explicado fenomenalmente. Es necesaria esa relación con los hijos donde se puede hablar de todos los temas. Mi experiencia habla de frutos positivos, de reconocer el valor afectivo y de la responsabilidad sexual. Gracias por tu exposición. Un saludo

Sonsoles dijo...

Gracias Angelo, veo que por tu parte he aprobado el curso.
Bss

Hilda dijo...

Sonsoles, los que dieron el curso pueden estar satisfechos porque alguien entendió. Que forma tan sencilla de expresar lo que entendiste de algo tan grande. Que más gente lo entendiera así y lo llevara a la práctica.
Un saludo. Hilda